El alto precio de la electricidad se une la reducción de los ingresos familiares, lo que ha supuesto que el dinero destinado al pago de las facturas de suministro eléctrico suponga un porcentaje mucho mayor que antes, teniendo a veces que priorizar estos pagos por delante de otros recursos básicos como la alimentación. La consecuencia es que el 17% de la población española destina más del 10% de sus ingresos familiares al pago de las facturas, cifra que se ha incrementado en 9 puntos en 6 años, según informa Ecodes.
“No es un problema exclusivamente de colectivos que ya estaban en riesgo de exclusión; actualmente está situación la viven hogares que tuvieron hasta hace poco un nivel de vida medio, pero perdieron su empleo, se les terminó la prestación por desempleo y no tienen ingresos, o personas mayores con pensiones bajas que no pueden hacer frente al pago de la factura eléctrica debido al incremento del coste de estas”, afirma la organización maña.
Información veraz y asequible
“Con esta guía pretendemos ofrecer a los ciudadanos una información veraz y asequible, para que mediante hábitos, consejos y medidas fáciles de implementar, en su mayoría de bajo coste, ayuden a los ciudadanos a ahorrar energía en su hogar y reducir el gasto de su factura eléctrica, mientras actúan frente al cambio climático, el gran reto del siglo XXI”, añade Ecodes.
Así, en la guía se tratan situaciones cotidianas como:
• Alimentarse sin derrochar energía: frigorífico, cocina, horno, microondas y lavavajillas
• Lavar la ropa a bajo coste: la lavadora, la secadora y la plancha
• Calentar el agua sin derretir las tuberías: el termo eléctrico.
• Qué bombilla elegir
• La temperatura adecuada: calefacción, refrigeración, aislamientos y ventilación
• La “caja tonta” y otras pantallas
• “Electrovampiros” en el hogar: consumos fantasmas, regletas y programadores
Y se ofrecen ejemplos concretos de lo que se puede lograr:
• Entre tener un frigorífico al máximo y al mínimo hay una diferencia de entre 10 y 15 € por factura. Por cada grado que bajemos, conseguiremos un 5% de ahorro.
• Al cocinar con vitrocerámica, en el fogón de 21 cm, se consume 2.200 Wh en 1 hora, lo que equivale 0,36 € por hora. Medidas como cocinar tapando las cacerolas ahorran hasta un 25% de energía.
• En invierno es suficiente mantener la casa a 21ºC, purgando los radiadores e instalando reflectores. Por cada grado que aumentemos la temperatura, consumimos entre un 7% y un 10% más de energía.
• Al instalar sencillas medidas de aislamiento en puertas y ventanas como burletes, bajo puertas, aislantes en las cajas de las persianas o láminas aislantes para colocar en los cristales se consigue más de un 25% en ahorro en ventanas.
La guía también ofrece una comparativa entre consumo de bombillas y recuerda que la vida útil de una bombilla LED es 25 veces mayor que una incandescente y 3 veces más que una de bajo consumo.
* Costes aproximados de electricidad de 1 bombilla encendida durante 4 horas todos los días.
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